Los dibujos que se muestran corresponden a los dibujos de despedida que han realizado los niños en su última consulta. A continuación, aparece un breve resumen de los comentarios de los pacientes, pero se pueden leer los fragmentos originales más abajo.
Luis, 40 años
“Fuiste el último empujón que me faltaba para empezar a creer en mí. Conseguimos que poco a poco fuera capaz de ver en mí lo bueno que tengo y no sólo lo malo. Fue una magnífica idea hacer aquél cursillo con el cual te conocí y a través de él, tener consulta contigo. De verdad, muchísimas gracias”.
Juan Carlos, 50 años
“Como persona: maravillosa, como psicóloga: especial. Fue una satisfacción poder ser tratado por María, supe empezar a ser YO. Gracias a María, me cambió la vida por encontrar mi verdadero fondo. Como podría explicar lo sencillo que es estar en una terapia con María y sacar todo tu ego. Un tiempo que jamás voy a olvidar. Gané en todos los sentidos. Su capacidad para sacarte tus miedos, los que no te dejan vivir en paz, es fascinante. Gracias a María tengo más clara mi vida pues supo ayudarme a valorarme a mí mismo. Gracias de corazón, María”.
Irene, 30 años
“No tenía ganas ni ilusión por vivir, para mí la felicidad no existía. Hace un año, conocer a María me cambió mi vida, ahora me estoy encaminando hacia la felicidad. Gracias María.”
Familia A.
“Nuestra experiencia fue muy positiva. Al principio éramos un poco escépticos sobre los resultados que este tipo de sesiones podían aportar, ya que nunca antes habíamos asistido a terapia familiar al considerarnos una familia “completamente normal”, pero poco a poco, y con la ayuda y orientación de María, descubrimos nuevas y más efectivas maneras de entender y comprender cómo se podía sentir nuestra hija. Además, nos ayudó a conocernos mejor y a expresar de una forma más abierta nuestros sentimientos”
Carmen, 55 años
“¿Cómo es María para mí? Yo diría que es mi ángel de la guarda ( y no soy creyente), una persona capaz de llegar a lo más hondo de ti sin que te sientas incómoda, hacer que te sientas mejor persona, llevarte al rincón donde aún te quedan fuerzas cuando creías que ya las habías agotado, enseñarte a perdonar y perdonarte, estar siempre a tu lado para mostrarte lo que tienes delante y no ves, ayudarte a superar las dificultades… llevo tiempo con María y no se me ocurre nada de lo que no haya sido capaz hasta ahora. Para mí… la terapeuta perfecta!”
Teresa 62 años
“Con María aprendí a ordenar mis propios criterios de forma coherente y a obtener fuerza y equilibrio de ellos. Su honestidad y amabilidad me dieron ánimos para adentrarme en mí misma”. TERESA 62 AÑOS
Melanie, 19 años
“Me hizo cambiar el chip y ver las cosas de manera más positiva. Te hace sentir super a gusto desde la primera terapia, y hace que puedas expresarle todo sin ninguna vergüenza”.
Mónica, 40 años
"Considero que mi experiencia en terapia se describe perfectamente con el deseo de no darla por terminada o abandonarla (en mi caso todo un logro compartido con mi terapeuta). Estoy consiguiendo respetarme a mí y a mis espacios, concediéndome beneficios y cuidándome poco a poco, estoy conociéndome o "re-conociéndome", permitiendo sacar a la superficie facetas de mi personalidad que me hacen sentir bien y me reconfortan.
Es muy difícil definir en unas pocas frases los beneficios de la terapia y de la relación paciente-terapeuta desde un punto de vista parcial como es el mío, no obstante, lo entiendo como un guía en un camino desconocido al cual no puedo poner punto de llegada, por el momento, pero que me está resultando productivo, satisfactorio, reconfortante y, por qué no, a veces duro recorrer."
Raquel, 38 años
“Intento vivir y salir adelante tras una pérdida que truncó mi vida. El hecho de que alguien no solamente te escuche y te acompañe, sino que te ayude a ver que tienes recursos personales en los que sujetarte, que igual que la culpa está ahí, también puedo perdonarme, respetar lo que siento y cuidarme, y sentirme merecedora de ella. María no me dice lo que a veces quiero escuchar porque no se trata de eso, sino que es posible enfocar mi vida de otro modo. Vaya por delante mi ánimo para que pidáis ayuda, y mi más sincero agradecimiento a María por su ayuda y acompañamiento”.
Marta, 33 años
“Para mi la terapia debería ser como cuando te rompes un hueso y vas al traumatólogo, cuando te encuentras mal en terapia lo solucionas”.
Elena, 19 años
“Ser la hiedra que encuentra su camino guiándose por el rodrigón. El descubrimiento inquietante de uno mismo. Logros sigilosos que redefinen y sentimientos reconocibles. Magia y complicidad”.
Pilar, 51 años
“Asistí a consulta con María porque no sabía las respuestas a mis preguntas, no sabía solucionar mis problemas, tenía sentimientos de culpa, tenía miedo a la muerte de seres queridos; no sabía pedir a los demás lo que necesitaba; tampoco sabía discutir, tenía miedo a cualquier disputa.
En la primera consulta noté que María tenía algo especial y contactamos enseguida.
María no te contesta a tus preguntas, hace que tú sepas la respuesta; no te soluciona los problemas, te guía a encontrar la solución; te enseña a no sentirte culpable; no te quita el miedo, te ayuda a superarlo; te enseña a pedir lo que quieres; y te enseña las bondades de las discusiones bien llevadas.
Para mí eso ha sido lo más importante, María me ha enseñado a ir resolviendo mi vida”
Álvaro, 31 años
“Me resulta difícil explicar mi experiencia en la terapia con María por el hecho de que a lo largo de aquel tiempo mi vida cambió y la conciencia de mí mismo también. Son demasiadas cosas y sólo puedo dedicar palabras enormemente positivas. Por intentar sintetizar, comentar que su método de trabajo me parece el más valioso, pues ella es una guía o un espejo en el que tú te miras. Eres tú quien se descubre a sí mismo con su gran ayuda y ésta me parece la única vía de verdad efectiva para el cambio, la superación de problemas, el autoconocimiento. Mucho más útil y eficaz que los sermones o definiciones de manual que suelen transmitir muchos psicólogos, porque cuando las ideas y el cambio provienen de dentro de ti es cuando realmente funcionan. María consigue que todo eso parezca fácil, consigue abrir tus puertas desde dentro, permaneciendo aislada por completo y a la vez acompañándote de manera muy íntima en el proceso. En mi caso, desde luego, ha sido fundamental para entender y encarar mi propio futuro y la recomendaría a cualquier persona, con independencia de que lleve o no algún problema a sus espaldas, como era mi caso, pues sólo el hecho de acercarse a uno mismo es una de las cosas más importantes que puedes hacer en la vida”.